Coyotes en Massachusetts
El coyote oriental está bien establecido en todo Massachusetts, excepto en Nantucket y Martha's Vineyard. Es un depredador de tamaño medio, que se alimenta de forma oportunista y se adapta extraordinariamente a una amplia gama de hábitats. Los coyotes prosperan en zonas suburbanas, urbanas y rurales. Utilizan cualquier alimento disponible de forma natural, incluidos pequeños animales, aves, insectos y frutas, así como fuentes artificiales como basura, comida para mascotas, alpiste y compost.
Los coyotes orientales son un recurso natural importante y valioso en Massachusetts. Están clasificados como especie de peletería, para la que se ha establecido un programa de gestión y temporadas de caza y captura reguladas.
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Descripción
El coyote oriental se asemeja a un perro de tamaño mediano por el tamaño y la forma de su cuerpo, pero tiene el pelaje más largo y denso y las orejas puntiagudas y erguidas. La cola es larga, con puntas negras y tupida. El color típico del pelaje es gris canoso, pero puede variar de rubio cremoso a rojo o negro casi sólido. El peso típico de las hembras es de 33 a 40 libras, mientras que los machos suelen pesar de 34 a 47 libras. Un macho muy grande puede rondar los 60 libras, pero se trataría de un animal excepcional. Los coyotes suelen parecer más pesados de lo que son debido a su espeso pelaje.
Historia
Un macho y una hembra adultos mantendrán activamente un territorio que puede variar en tamaño de 2 a 30 millas cuadradas. La época de cría alcanza su punto álgido a mediados de febrero. Dan a luz en una madriguera a entre 4 y 8 cachorros en abril o mayo. Los coyotes mantienen unidades sociales estacionales formadas por la pareja adulta y las crías hasta que éstas se dispersan solas a finales de otoño.
Alimentación, hábitos y hábitat
Los coyotes suelen ser tímidos y escurridizos, pero es frecuente verlos individualmente, en parejas o en pequeños grupos en los lugares donde suelen encontrar comida. Permanecen activos todo el año y no hibernan. Los coyotes se comunican vocalizando, marcando con su olor y mediante diversos gestos corporales. Es frecuente oírlos aullar y ladrar por la noche, o incluso durante el día, en respuesta a sirenas y otros ruidos fuertes. Cuando se oye aullar a una familia de coyotes, es fácil pensar que la zona está repleta de coyotes, pero normalmente se trata de unos pocos coyotes con sus crías. Los coyotes no aúllan para anunciar una matanza; esto atraería a otros animales salvajes. Los coyotes aúllan porque:
- Están comunicando a otros animales que no son parte de su familia que no entren en su territorio.
- Están localizando a los miembros de su familia dentro de su territorio.
- Están buscando pareja durante la época de cría.
- Las crías practican el aullido y pueden ser especialmente ruidosas a finales del verano, cuando intentan imitar a sus padres.
- Cuando existe una amenaza potencial para las crías, los coyotes adultos se dispersan y aúllan para distraer a la amenaza y alejarla de la madriguera.
Los coyotes son oportunistas, es decir, se alimentan de lo que tienen más a mano y es más fácil de conseguir. Su dieta omnívora consiste en una variedad de alimentos como roedores, conejos, ciervos, pájaros, insectos, reptiles, frutas y bayas. Se alimentan de animales atropellados, roedores y pájaros muertos por los gatos, así como de basura y comida de animales domésticos abandonados en el exterior. En zonas suburbanas, se sabe que se alimentan de animales domésticos desprotegidos, incluidos gatos domésticos y perros pequeños.